El gran escritor norteamericano Henry Miller dijo de él que se parecía un antiguo romano, por su fortaleza, su virtud y su sencillez, y la verdad es que su vida es un testimonio de autosuficiencia, autonomía y sabiduría, no obstante le gustaba el contacto con la gente, de sus muchas profesiones se distinguió como maestro y gustaba de las tertulias filosóficas.
No solo fue uno de los más grandes naturalistas
americanos, también fue un hombre excepcional; un pensador y un rebelde. Thoreau
nació en 1817 en Concord, Massachusetts y quienes lo recuerdan dicen que se
trataba de un hombre feo, fuerte, tímido y de maneras bruscas.
La laguna de Walden en Concord, Massachusetts |
Se dedicó a la enseñanza y aunque era un hombre temido
por su corto temperamento, era gentil con los niños, a quienes jamás golpeó con
la vara, como se acostumbraba, fundó varias escuelas pero eran proyectos de
corto aliento, su atención estaba en su deseo ferviente de convertirse en un autor
de renombre, en un gran poeta.
Era un hábil trabajador manual, albañil, carpintero y
ebanista y conocía a fondo las costumbres indias sobre todo sus técnicas de
rastreo y su conocimiento de la medicina natural, tenía una habilidad única
para capturar animales, en especial reptiles y era famosa su rapidez para
atrapar truchas con las manos.
Ralph Waldo Emerson, poeta y ensayista |
Emerson y los trascendentalitas eran románticos y al mismo
tiempo, reformistas, celebraban más al individuo que a las masas, a las
emociones más que a la razón, a la naturaleza más que al hombre, predicaban que
los cambios debían producirse primero en el individuo, para luego trasladarlos
al grupo y a la sociedad en general, creían que lo espiritual estaba en un
plano superior a lo material.
Emerson se interesó en el joven Thoreau y le dio algunos
trabajos, entre ellos, como tutor de sus niños. Emerson estaba intrigado por el
naturalista, quien acostumbraba a decir que la gente debería actuar de acuerdo
a sus creencias y no por costumbre, o por ser aceptado socialmente, el literato
alentó en el joven a buscar su independencia.
A los 28 años, Thoreau le pidió prestada un hacha y se
internó en los bosques de la laguna Walden, en una propiedad de Emerson, había
decidido vivir lo más cerca posible de la naturaleza.
Se hizo una cabaña y unos muebles, vivió de lo que
sembraba en su huerto, hacía pequeños trabajos a los vecinos tratando de no
ganar ni gastar dinero, sino lo esencial.
replica de la cabaña que construyó Thoreau |
Trabajaba sólo seis semanas al año, el resto lo dedicaba
a la lectura, a tocar su flauta y a la observación científica de la naturaleza.
Quería probar que la mejor manera de vivir era con simpleza, y que la
naturaleza le proveería de todo lo necesario para subsistir y recrearse con el
mundo.
Durante dos años vivió en Walden y escribió su famosa
obra Walden, o la vida en los bosques
que publicó en 1854. Leandro Wolfson en
su introducción al libro nos comenta: “Quienes
lo conocieron admiraron la maravillosa armonía existente entre su mente y su
cuerpo. Sabía encontrar su camino en la oscuridad nocturna del bosque,
guiándose más por los pies que por los ojos… era buen corredor, nadador,
patinador, botero, y probablemente muy pocos de sus conciudadanos podían
caminar más que él, y con más provecho… Sabía sentarse inmóvil por horas, como
parte de la roca en que estaba subido, para esperar el regreso del ave, el
reptil, el pez al que su presencia había espantado temporalmente.”
Henry David escribió un pequeño panfleto sobre el arte de
caminar, Walking, no muy conocido
sino por practicantes del naturismo, es el catecismo de los que gustan caminar,
solos o acompañados, en las montañas o entre los pueblos, explica de manera
extraordinaria porque caminar es una necesidad humana, se remonta a la Edad Media
cuando los caminos de Europa se llenaron de vagabundos y peregrinos cuya única
justificación era llegar hasta Tierra Santa, se embarca en sus memorias sobre
algunas de sus marchas por los bosques de Massachusetts y sus observaciones, no
solo sobre aspectos humanos, económicos y ecológicos que llamaban su atención,
sino que los hilvana con la literatura clásica, de la que tenía un gran
conocimiento, sobre todo del poeta romano Aulus Persius Flaccus del que hizo un
pequeño ensayo.
En 1845 Thoreau fue arrestado por no pagar unos impuestos,
a pesar de que el importe era pequeño, prefirió pasar la noche en la cárcel que
contribuir con un gobierno que favorecía la esclavitud y hacía la guerra (en
ese momento, USA le había declarado la guerra a México). Cuando Emerson fue a visitarlo
le preguntó: "Henry ¿Qué haces
metido allí?" a lo que Thoreau le respondió: "Ralph ¿Qué haces tú allá fuera?"
Escribió entonces un panfleto llamado Desobediencia Civil que sentó las bases
de una nueva manera de hacer política, Henry David Thoreau desarrolló la
doctrina de la Resistencia Pasiva, que era hacer oposición sin el uso de la
fuerza y la violencia, inspirado en algunas ideas de Santo Tomás de Aquino y de
la doctrina constitucional norteamericana, sus idea serían usadas décadas más
tarde, por Gandhi, en su lucha para independizar a la India por medio de la
resistencia pacífica y la no colaboración con el Imperio Británico, y por
Martin Luther King en su tenaz reclamo por
los derechos civiles de los negros en el sur de los Estados Unidos.
La laguna de Walden |
Thoreau creía, que la mejor manera como una sociedad
debería organizarse, era en base a las decisiones morales de sus individuos, y
no estar atados a las decisiones de una mayoría anónima.
Como buen individualista y hombre hecho a sí mismo, no le
tenía afecto a las autoridades e instituciones gubernamentales. "El mejor gobierno es el que gobierna
menos- sentenció- y será mejor si no
gobierna del todo".
Thoreau viajó poco, el creía que a un hombre le eran
suficiente un territorio de unos 10 Km2 para vivir su vida a plenitud, por
supuesto, recorriéndolo, estudiándolo y comprendiendo su dinámica y complejidad,
haciéndose parte de él.
Uno de sus recuerdos fundamentales fue un viaje en canoa
que hizo con su hermano por los ríos de Concord de los que publicó una memoria,
escribió una Historial Natural de Massachusetts y fue muy popular su ensayo Una Caminata en Invierno.
Un día decidió que quería conocer el océano y se fue con
un amigo a Cape Cod; de allí viajó hasta Canadá, cuando volvió, se jactaba de
haber gastado sólo 12 dólares, con los que compró incluso dos guías de turistas
en el viaje, que duró varios meses.
Sus diarios son copiosos en ideas y observaciones, hacía
entradas diarias y las últimas fueron días antes de fallecimiento, pero no
fueron publicados sino hasta 1906.
Viajaba en ropas de trabajo, le gustaba quedarse en casa
de granjeros y pescadores donde prestaba sus servicios por el alojamiento (como
agrimensor, carpintero, agricultor, constructor, maestro de párvulos y un largo
etc.)
Llevaba consigo un paraguas y una mochila grande, donde
cargaba libros y papeles, un libro grande para secar especímenes de flores,
unos binoculares, una cinta de medir, sedal para pescar, una cuchara, un vaso y
algo de sal, té, azúcar, harina y un pedazo de torta.
Los últimos años de su vida estuvo plenamente involucrado
con el movimiento abolicionista, se hizo parte del grupo del llamado Tren Clandestino, que era el nombre de
los que financiaban, planificaban y ejecutaban escapes de esclavos negros que
huían del sur hacia el norte
Hasta su muerte, por tuberculosis, a los 44 años en 1862,
Thoreau, fue un hombre frugal e independiente, Emerson decía de su amigo: "es el único hombre libre del pueblo, y
su independencia hace ver a los otros como esclavos"
Fue un hombre que vivió como pensó, y sus ideas son fuente
de inspiración para muchos ambientalistas de todo el mundo. – saulgodoy@gmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario