lunes, 8 de abril de 2024

Delitos ambientales.

 





Esta denuncia la interpuse el 09-02-2023 ante la oficina del Ministro del Poder Popular para el Ecosocialismo y ante el Ministerio del Poder Popular de Atención a las Aguas, también cursé copia ante la Fiscalía en materia ambiental.

Hasta el momento, ninguna acción de los organismos del Estado se ha manifestado, aunque la promesa fue una visita de inspección a la brevedad posible. El problema trata de la intervención por parte de ganaderos caprinos en una cuenca hidrográfica protegida dentro del Área Metropolitana de Caracas, con el apoyo de varias instancias locales y gremios, con un resultado desastroso para la Cuenca, porque no solo la están desertificando, sino que están acabando con la necesaria salubridad del área.

Pido a mis lectores habituales y a la opinión pública que piense que la incapacidad del gobierno para responder a asuntos tan graves como El Arco Minero y la isla de Los Roques, empieza a pocos kilómetros de los asientos del poder público de nuestra capital, en Guarenas y Santa Lucía, donde las leyes ambientales son burladas con el apoyo de las autoridades locales, y nadie mueve un dedo para corregir esta situación, que favorece a un grupo pequeño de delincuentes ambientales en detrimento del ambiente, en una de las más importantes Áreas Bajo Régimen de Administración Especial (ABRAE) del Estado Miranda.

Todas las cuencas productoras de agua para Caracas se encuentran altamente intervenidas y en peligro de colapsar, debemos actuar con urgencia y responsablemente para evitarlo.

Lean la denuncia y piensen, si en medio de estos drásticos cambios climáticos y la deforestación y envenenamientos de nuestras aguas, tendremos futuro para las generaciones de venezolanos que aún no han nacido; el Socialismo del siglo XXI rompió con el pacto de la sustentabilidad y le dio la espalda a la vida, pero no puedo permitirme quedarme callado y aceptar la oscuridad y la muerte que quieren para nosotros. Gracias por su atención.

 

Señores

Ministerio del Poder Popular para Ecosocialismo

Atención: Ministro del despacho.

Fiscalía con competencia ambiental.

 

Asunto:

La situación de peligro para la integridad de la sub-cuenca hidrográfica Río Tuy y de la sub-cuenca Río Grande, ambas comprendidas en un área bajo régimen de administración especial, que según la Ley Orgánica para la Ordenación del Territorio, en su artículo 15, incluye las Zonas Protectoras, esto, debido a las actuaciones del INTI y de la Fiscalía de Guarenas que han promovido la ganadería caprina y una agricultura extensiva en esta zona no apta para esta actividad, promoviendo la desertificación y la pérdida del recurso agua, en el Municipio Paz Castillo y Municipio Plaza del Estado Miranda.

 

El Problema:

Hay una situación grave de desinformación y solapamiento de competencias de los distintos órganos del estado que se están ocupando de administrar los reclamos y necesidades de la población dentro de este territorio. Debido a su compleja naturaleza jurídica, se está propiciando políticas públicas que van en detrimento de la calidad de vida de toda la región.

Aun cuando claramente, por tratarse de un Área bajo Régimen de Administración Especial (ABRAE), su competencia cae bajo la jurisdicción del Ministerio del Poder Popular para el Ecosocialismo, tanto el INTI como las alcaldías, la Fiscalía en materia ambiental e incluso el Ministerio para el Poder Popular para la Industria y el Comercio están actuando de manera no coordinada y en detrimento de unos objetivos comunes, como sería la preservación de la integridad de la cuencas productoras de agua con miras para preservar la sustentabilidad del territorio en cuestión.

El desorden jurisdiccional y las políticas contradictorias para estos fines están dañando la posibilidad de preservar estas cuencas para el futuro inmediato; por eso se hace necesario la participación decisiva del Ministerio para el Ecosocialismo, como órgano rector de ese territorio, para solventar estas contradicciones que le están ocasionando daños irreversibles a las cuencas.

Hay problemas de interpretación, de fueros y jurisdicciones, de gobernabilidad y preferencia, que deben ser resueltos a la brevedad. El llamado a poner orden, por mandato constitucional, es del Ministerio para el Ecosocialismo.

 

Las afectaciones:

Debido a las intervenciones desordenadas, no planificadas, de personas en su condición de productores agrícolas informales, la cuenca en cuestión ha sufrido un deterioro de sus suelos y aguas, siendo la principal causa las deforestaciones, quemas y la prevalencia del monocultivo propio de la explotación del conuco.

Los suelos de la cuenca, en estudios previos a su declaratoria como zona protegida, arrojaron como resultado que no eran aptos para la actividad agrícola, siendo su principal composición la arcilla roja con esquistos de cuarzo, con una capa vegetal de menos de cinco (5) cm., los bosques lluviosos originales de sus montañas son productos de siglos de evolución, que crecieron en aislamiento y sin comunidades humanas.

Estos bosques productores de lluvia alimentaron por mucho tiempo los acuíferos de la región y

daban el caudal de agua a una intrincada red de quebradas que alimentaban las cuencas del Río Tuy al sur (Municipio Paz Castillo), y de Río Grande al norte (Municipio Ambrosio Plaza), y que desde una altura de los 1080 mt. SNDM, bajan hacia los desarrollos urbanos de Guarenas y Santa Lucía. Es lamentable constatar que los cauces de estas vertientes se utilizan para desechar basura y escombros, muchos de ellas están prácticamente bloquedas con los desperdicios.

Las primeras señales de la grave deforestación de estas cuencas altas se sintieron, sobre todo, en

Guarenas, con las inundaciones de 2010, que anegaron importantes sectores de la ciudad, con

pérdidas millonarias en bienes y servicios, pérdidas de vidas y paralización de las actividades.

El agua bajó torrencialmente y produjo graves daños en las zonas industriales y residenciales; a pesar de este aviso, no se hizo nada para detener la deforestación de las cuencas altas, todo lo contrario, el problema se ha agravado.

Es importante señalar que el cambio climático que está afectando al planeta no va a mejorar, al

contrario, empeorará, con lo que puede esperarse inviernos cortos, pero mucho más violentos y

abundantes en precipitaciones; una vaguada hacia Guarenas podría ser catastrófica, y los funcionarios públicos que están permitiendo que el deterioro ambiental de las cuencas altas continúe, están desestimando el peligro que esto representa.

La Materia:

Por definición, la materia que prevalece en el territorio anteriormente identificado es ambiental, no es agrícola, ni de derecho de familia, ni comunitario, ni de trabajo, todos estos aspectos vienen, de manera subsidiaria, a conformarse como un todo; aún en la cuestión de justicia social, la materia ambiental garantiza que el bien común de la mayoría de la población, no el de una familia ni de una comunidad, sino el de toda la Nación, esté protegido y asegurado, pues se está defendiendo el principio de la sustentabilidad, que suma a los grupos interesados, a las generaciones de venezolanos que aún no han nacido y que van a necesitar un ambiente sano, variado y estable para hacer sus vidas.

No podemos ni debemos agotar los recursos naturales de la Nación para satisfacer las necesidades de una generación, menos para favorecer intereses crematísticos o políticos de algunos actores, o por la ignorancia de unos pocos funcionarios que no entienden las razones de la existencia de áreas protegidas y reservas naturales; una de las funciones del Ministerio para el Ecosocialismo es la educación, y eso incluye a las otras ramas del gobierno, convertirlos en cooperantes en la tarea de la preservación del ambiente y de su recurso fundamental, el agua.

 

Las acciones:

De inmediato el Ministerio debe avocarse al problema y convocar reuniones de alto nivel con los

organismos involucrados, instruirlos en los aspectos legales, operativos y de conservación de estos

espacios naturales, hacerles ver que las actividades agrícolas y ganaderas están estrictamente reguladas con miras a preservar estos espacios, y que todos los daños y desmejoras del territorio deben ser reparados a la brevedad posible, para ello propongo lo siguiente:

Convocar reuniones urgentes con los alcaldes de ambos municipios, tanto en Guarenas como en

Santa Lucía, invitar al INTI, a los fiscales regionales, Guardia Nacional, a los representantes de las

comunidades, gremios y empresas involucrados y explicarles la naturaleza de estas áreas bajo régimen de administración especial, para que cesen de inmediato todas las actividades que propician el deterioro ambiental en estos territorios.

Hacer una inspección por cada municipio sobre las áreas afectadas y un inventario de los daños a

reparar, tomar medidas urgentes sobre las posibles amenazas de incendios forestales, prohibir de

manera definitiva la ganadería vacuna, caprina y ovina en estas cuencas hidrográficas debido al gran daño que causan en suelos frágiles; convencer a los organismos involucrados y a los ejecutores de esas actividades de que ese tipo de explotación es aptas para otros tipos de terrenos, como las sabanas, pastizales áridos, montañas alpinas, pero no para bosques lluviosos y nacientes de agua, como son estas áreas en cuestión.

Venezuela dispone de amplios espacios distribuidos en su geografía para la explotación agrícola y

pecuaria, son terrenos aptos y equipados para este tipo de explotación, muchos de ellos están

abandonados y sin producción, allí hay oportunidades; no debe ser las áreas protegidas las que se

deban utilizar para resolverle sus problemas económicos, la producción de alimentos en el país no

puede ser satisfecha sacrificando nuestras reservas de bioma, eso es un crimen ambiental.

El problema climático que afecta al mundo tiende a agravarse y una de sus consecuencias es la

desertificación y el agotamiento acelerado de las reservas de agua potable; devastar unas cuencas

productoras de agua atenta contra los derechos humanos de todos los venezolanos. Al Ministerio

para el Ecosocialismo le corresponde la iniciativa de vigilar, conservar y reparar este complejo sistema de reservas naturales, el compromiso es urgente.

 

Aspecto legal:

Las áreas referidas en este documento, como los vemos en sus mapas anexos, están afectadas por

sendos decretos ambientales, designándolas como áreas protegidas por ser parte de cuencas

hidrográficas y de la Zona Protectora del Área Metropolitana de Caracas.

El Decreto 2306 de fecha 05-06-92, correspondiente al Área Crítica con Prioridad de Tratamiento

Cuenca del Río Tuy, publicado en Gaceta Oficial No. 35121, de fecha 29-12-1992, y su

correspondiente Plan de Ordenamiento y Reglamento de uso del Área Crítica con Prioridad de

Tratamiento Cuenca del Río Tuy, correspondiente al Decreto 2308 de fecha 05-06-1992, publicado

en Gaceta Oficial Extraordinaria No. 4548, trazan un polígono que cubre las áreas mencionadas,

haciéndolas parte de una ABRAE (Área Bajo Régimen de Administración Especial) con exclusiva

jurisdicción del otrora Ministerio del Ambiente, hoy Ecosocialismo y el nuevo ministerio del agua.

De igual manera, el Decreto 1046, de fecha 19-07-72, publicado en Gaceta Oficial No. 29859 de la

Zona Protectora del Área Metropolitana de Caracas, y su Plan de Ordenamiento de la Zona

Protectora del Área Metropolitana de Caracas, según Decreto No. 2299 de fecha 05-06-92, publicado en Gaceta Oficial No.35153, de fecha 18-01-93, afectan ambas áreas, otorgándole la cualidad de protegidas.

Estos decretos están vigentes y sin variación alguna en su contenido, es decir, son leyes de la

República.

En el año 2001 hubo una actuación judicial de la Fiscalía Tercera del Ministerio Público con

Competencia Nacional en Defensa Ambiental, ejecutada por el Dr. Nicolás A. Mendoza R., en la que reconoce el área Bajo Régimen de Administración Especial y dicta sentencia en contra de varios ciudadanos incursos en delitos ambientales (Medidas Judiciales Precautelativas Ambientales

Urgentes) sobre la Cuenca Río Grande, el expediente es el FDA-III-294-2001.

 

Resultados a esperar:

Con esta intervención del Ministerio para el Ecosocialismo, se espera que retorne la ponderación y el equilibrio en los territorios afectados, que las actividades degradantes del ambiente cesen de

inmediato, que los funcionarios que han prestado su apoyo a esta actividades (trabajando en las

sombras, sin emitir documentos oficiales que respalden sus decisiones, promoviendo

comportamientos delictivos, poniendo en indefensión jurídica a la comunidad y contando con la

posibilidad de negar su participación en estos hechos que infringen la Ley) rectifiquen y coadyuven al cumplimiento de la ley, que las células agrarias otorgadas, los permisos de explotación otorgados y los apoyos en torno a estas actividades contaminantes y destructoras del ambiente sean cancelados; en caso contrario, debe aplicárseles a sus causantes todo el peso de la ley. Tanto la Gobernación del estado, las alcaldías, como el Ministerio para el Ecosocialismo deben realizar un estudio de impacto ambiental en los territorios afectados con el fin de reparar los daños causados, que deben incluir saneamiento de las áreas otorgadas en explotación, reforestación y desalojo de personas y animales que provocaron tales daños.

 

Como activista ambiental y residente de la zona me pongo a su entera disposición para prestar todo el apoyo necesario para que se consigan estos resultados.

Queda de usted (es)

Saúl Godoy Gómez

Periodista y ambientalista.

C.I. 3.666.779



jueves, 4 de abril de 2024

El fascismo según el chavismo

 



Las fuerzas del chavismo, que son cada día menos venezolanas, están discutiendo una Ley en Contra del Fascismo, esto de inicio, tiene varios problemas medulares que afectan la justificación de tal iniciativa, en primer lugar alguien debió otorgarles una carta de pureza de sangre e ideología que los certifica como “no-fascistas”, ya que si van a combatir el fascismo y a perseguirlo, deben tener el historial, las ideas y los principios que los identificarían como contrarios al fascismo, o por lo menos pruebas contundentes de que ellos, no son fascistas.

En este sentido me temo que si se refieren al contenido histórico de los llamados “revolucionarios”, muchas de estas revoluciones de izquierda se hicieron en siglo XX en nombre del fascismo, no solo en Italia, Japón y Alemania, sino también en buena parte de Europa del Este y en la misma Rusia y China, lo que demuestra, que los revolucionarios pueden estar contaminados de fascismo, en la misma España que tuvo su terrible guerra civil que luego se tornó internacional inaugurando la Segunda Guerra Mundial, el fascismo se cambiaba de caretas con una facilidad pasmosa, lo que quedaba eran las canciones, los eslogan y las banderas, pero allí se fusilaban con la misma prestancia a libertarios, curas, legionarios, demócratas, comunistas y poetas. Afortunadamente, este capítulo de la historia española terminó en una transición hacia una monarquía parlamentaria.

Si fue la Cuba de los Castro la que les otorgó esa denominación y certificó a la Sra. Delcy Rodríguez como antifascista, debido al contenido militarista, autoritario y estatista del gobierno de la Habana, por más marxismo e idealismo Martiano que se agregue al condumio, no podrá pasar como antifascista, y menos con autoridad para abrir sucursales y hacer los consabidos pogromos.

Es muy difícil saber en qué espejo se está mirando la Sra. Delcy para promover desde la Asamblea Nacional una legislación antifascista, empezando porque ninguno de los venezolanos de a pie, de los ciudadanos de esta República tropical en pleno ejercicio de nuestros derechos políticos, ha sido consultado, ni hemos sido parte del debate que debería darse antes de que nos obliguen a forzar esa peligrosa ley por nuestras gargantas, y digo peligrosa por los inusuales comentarios que se han producido para acallar a la oposición política con penas de cárcel, inhabilitaciones, tortura y muerte. En nuestro país nadie se está chupando el dedo, todos nos imaginamos que esta ley está diseñada para perseguir a los disidentes del régimen, o sea al 86% de los venezolanos

 Quienes hemos estudiados los regímenes llamados fascistas, quienes hemos escrito sobre el tema, nos produce una extraña sensación de deja vú ver de nuevo frente a nosotros al lobo del cuento de la caperucita disfrazarse de la abuelita para intentar comerse a la inocente niña que solo quiere constatar que todo está bien… porque no lo está, el lobo no se parece nada a la abuelita, así como el chavismo no es anti fascista, todo lo contrario, ha demostrado en las dos décadas de desempeño como gobierno, ser un motor del fascismo más puro y mortal de la historia reciente.

Los movimientos fascistas han estado históricamente conectados de manera directa con el racismo, con la discriminación por género, clase, creencias y capacidad intelectual, esas construcciones políticas de gente que no son personas, que son enemigos para los verdaderos nacionalistas y patriotas ha sido una constante con la que se puede medir el fascismo, de allí nacen muchos de los discursos populistas tan fecundos en nuestros tiempos, donde se pretende desde el gobierno “proteger” a un grupo, de la amenaza constante de “los otros”, de que no los odien ni se sientan agredidos por lo que dicen de ellos los diferentes, los que sí tienen apellidos, los contrarios en la política, para el chavismo se trata de una guerra continua entre traidores y los verdaderos patriotas, los ricos contra los pobres, los verdaderos creyentes contra los herejes, de ese hervidero de apartheid y rechazo es que nació el holocausto judío en la Alemania Nazi y todas esas manifestaciones brutales de violencia sistematizada de una parte de la sociedad en contra de la otra.

Según el profesor Federico Finchelstein de la Universidad de California, en su monografía Las Mentiras del Fascismo (2020), la mentira es el arma que más gusta a los fascistas y por la que son tan peligrosos. Dice Finchelstein:

Mentir es una característica del fascismo que comparte muy pocas cosas con las otras formas de hacer política en la historia. Se sitúan más allá de las formas tradicionales, de una manera distinta a las otras tradiciones políticas. Mentir es incidental, digamos, en el liberalismo, en una manera que es diferente al fascismo. Y, de hecho, cuando vemos los engaños fascistas, estos se sitúan más allá de cualquier forma de duplicidad. Los fascistas consideran sus mentiras al servicio de simples y absolutas verdades, que son solo mentiras más grandes. Esto hace que sus mentiras políticas necesiten de una historia propia.

Los fascistas tienden a utilizar narrativas distintas y convenientemente manipuladas para justificar sus acciones, cambian la historia de los países para su propio provecho, y el lenguaje revolucionario está preñado de galimatías que tratan de justificar los crímenes más horribles para hacerlos pasar como necesarios y hasta heroicos.

Para el profesor Finchelstein el populismo tomó las banderas del fascismo luego de su derrota en Europa en 1945, pero rápidamente adaptó sus principios dándoles un giro para que encajara como un movimiento democrático. Hagámonos la primera pregunta ¿Es el chavismo populista? ¿Es capaz de cambiar la historia del país, anteponiendo intereses de clases y etnias, cambiando personajes y situaciones a conveniencia, quitándole significados a unos eventos y dándoselos a otros, borrando nombres y promoviendo otros?

Para poder imponer sobre la sociedad el imperio de la mentira fascista, necesitaban acallar las voces disidentes, por lo que no fue extraño que el primer gran acto político del grupo organizado por Mussolini como partido político, el Fasci di Combattimento, fuera contra un periódico, y fue así que el 15 de Abril de 1919, en la ciudad de Milán, un grupo de militantes fascistas atacaron la sede del diario Avanti, destrozaran sus instalaciones, produjeran cuatro muertos más de treinta heridos, dando inicio a una tradición de que el fascismo se inyecta con sangre y violencia.

Pero entonces, ¿Quiénes son los que han acabado con la prensa impresa en el país? ¿Quienes pretenden imponer una hegemonía comunicacional para que solo la voz de los que no tienen voz se escuche ella solita?  ¿Quiénes tienen amenazados a los influencers, periodistas, opinadores, anclas de programas informativos, locutores de radios en el país para que no expresen sus puntos de vistas, críticas y denuncias sobre el gobierno de Maduro?

En su espléndida obra La Anatomía del Fascismo, el investigador e historiador Robert O. Paxton (2004) hace un detallado estudio sobre el fascismo en Italia durante la Primera y Segunda Guerra Mundial, y en ella nos precisa sobre sus alcances, explica Paxton lo siguiente:

 

El fascismo en el poder trajo algunos cambios lo suficientemente profundos para ser llamados “revolucionarios”, si estamos dispuestos a darle a la palabra un significado diferente. En su mayor madurez, el fascismo redibujó las fronteras entre lo público y lo privado, reduciendo de manera importante lo que había sido la exclusividad de lo privado. Cambió la práctica ciudadana de gozar de derechos y deberes constitucionales a su simple participación en ceremonias masivas de apoyo al régimen y conformidad con el mismo. Reconfiguró las relaciones entre el individuo y la colectividad, de modo que un individuo no tenía derechos fuera de los intereses de la comunidad. Expandió los poderes del ejecutivo- tanto del partido como del estado- en una apuesta por el control total. Finalmente desató emociones agresivas solo conocidas en Europa durante las guerras o las revoluciones. Estas transformaciones muy a menudo ponía a los fascista en conflicto con los conservadores enraizados en familias, iglesias, rango social y propiedad… aunque hubo algunas complicidades, acomodos y ocasional oposición en esta junta entre el capitalismo y el fascismo en el poder, no se puede considerar que el fascismo fuera un conservadurismo mucho más musculoso, aun manteniendo el régimen de propiedad y jerarquía social existente.

 Esto es importante destacarlo, debido a que el fascismo es un voraz consumidor de capital para poder mantener su control y vigilancia de sus nacionales, debe financiar sus aventuras militares y políticas en el extranjero, y mantener a una élite con un alto estilo de vida, por lo que siempre anda tentando a los gobiernos y empresas capitalistas para que trabajen en asociaciones mutuamente productivas.

Una verdadera ley antifascista debería procurar la libertad de pensamiento, de la libre expresión, del debate democrático, de la promoción de una auténtica contraloría social sobre las ejecutorias del gobierno, no aumentar la censura o dejar sin información a los ciudadanos, ni perseguir a las personas por emitir sus pareceres sobre funcionarios e instituciones que actúan de manera irregular y contraria a la ley, que están allí para brindarle servicios a la ciudadanía, no para favorecer a un grupo de privilegiados cercanos al poder.

Cuando el estado se convierte en el centro del universo posible de un país, aún a costa del bienestar de sus ciudadanos, cuando la represión y la amenaza son los instrumentos de relación del gobierno con el pueblo, cuando el poder político se inmiscuye en el comercio y la industria como condición necesaria para su existencia, cuando las elecciones son manejadas por los intereses del partido en el poder, nos encontramos ante unos indicativos que anuncian un estado fascista.

 Paxton habla en su libro de una tendencia fatal de los órdenes fascistas a su radicalización, tanto a lo interno como a lo externo, el partido Nazi y el fascista en Italia, ambos terminaron en cruentas persecuciones internas, se inventaron tantas conspiraciones y atentados que estaban en una constante caza del enemigo interno, era imposible para el poder entender que el hombre bajo el yugo de la tiranía, buscaba, a como diera lugar, su liberación. En cuanto a las aventuras en la guerra contra otros países, el ánimo de conquistas jamás cejaron entre sus altos jerarcas, no tanto por imponer su voluntad sobre otros dominios, sino para tener ocupados a los militares a quienes siempre temieron como sus verdaderos enemigos, cuando un régimen fascista entra en estado de radicalización, se torna peligrosamente violento presagiando su desastroso final, es una clara señal de su decadencia y su pronto derrumbe.

En mi opinión la ley mordaza que los chavistas tratan de impulsar de manera “express” en su Asamblea Nacional, debería llamarse Ley anti demócrata, y promulgarse como un acto de un gobierno fascista.

El hecho fatal de que las elecciones ya las tienen encima los está presionando de tal manera, que están cometiendo errores garrafales, sus últimos días los encuentran con unas cárceles llenas de presos políticos, tentados a entrar en una conflicto bélico con Guyana, con un aparato electoral que les hace agua y los está hundiendo, en una confrontación de declaraciones con una comunidad internacional que reclama precisamente su actitud fascista y antidemocrática, incumpliendo con compromisos  que ya no pueden eludir, tal y como Paxton previó en su libro, la radicalización ya está aquí y con ella el final de un sueño fascista.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

jueves, 28 de marzo de 2024

Una propuesta indecente.

 


El juego se trancó, pero no significa que terminó, el gobierno de Maduro con sus torpes jugadas lo que hizo fue descubrir su talante, y no es que desconociéramos quien era, todos sabíamos, y así ellos lo habían anunciado a los cuatro vientos, que no entregarían el poder a las buenas… y allí están, atrincherados, esperando nerviosos la andanada que les viene.

Quizás no se dieron cuenta, pero impidiendo la postulación de la candidata, la profesora Corina Yoris, en representación de la mayoría de la oposición democrática venezolana, quedaron al descubierto, marcados por unas horribles manchas que no se quitan y que los identifican a donde quiera vayan… y eso incluye al troupe de candidatos y partidos instantáneos que se han sumado al cortejo, más bien fúnebre que festivo, que insisten en convocar y participar en unas elecciones que no son elecciones.

Ya elegir no significa escoger, expresar la voluntad ciudadana, darse un gobierno, nombrar representantes… si vamos a la torcida lógica del filósofo de turno del gobierno chavista, las elecciones en Venezuela significan que solo Maduro escoge, sin votantes y con la luz apagada, para al cabo de unas horas vuelva la luz del apagón (una situación reiterativa en el país) y nos encontremos que diez millones (o más) de venezolanos, una gran mayoría, lo han escogido a él como el próximo presidente, en un manido truco cibernético, algo que solo un CNE desalmado es capaz de lograr.

Es el nuevo concepto que naciones progresistas como Cuba, Rusia, Corea del Norte, Nicaragua, China, y en la cola, España, México, Colombia, Vietnam, Guyana, Brasil, El Salvador, están experimentando para hacer de sus líderes y partidos hegemónicos, los únicos capaces de poder gobernar sus territorios, y llevarlos al reino de la felicidad posible aquí en la Tierra.

¿Y qué significa llevar a estos países al reino de la felicidad? El economista Robert L. Heilbroner en su libro El prospecto Humano (1975) nos lo explica:

Solo dos resultados se pueden imaginar en este histórico drama tocado por la tragedia. El primero es el descenso de una gran parte de la población de este mundo subdesarrollado a una condición continua de desorden social, marcada por expectativas de vida cada vez más cortas, descalabro de sus capacidades físicas y mentales, incremento de una apatía política mezclada con protestas y pillaje de los alimentos. Estas sociedades probablemente sean gobernadas por gobiernos dictatoriales sirviendo los intereses de una pequeña economía y una clase militar pudiente, presidiendo sobre sobre un territorio podrido donde la gente vive entre la resignación, la indiferencia y el desespero.

La alternativa que proponía el profesor Heilbroner era la de un gobierno capaz de frenar este descenso al infierno, con un liderazgo dedicado, bien organizado y con una estructura partidista nacional; en nuestro caso, sería el trabajo que está haciendo nuestra candidata María Corina Machado, desde hace ya algunos años, recorriendo el país y organizando las regiones con partidos afines a su plan de rescate de Venezuela. Pero el chavismo está trabajando a toda máquina y utilizando todos los medios posibles, aún los más criminales, para que esta opción nunca sea una realidad, Maduro está dispuesto a incendiar al país y reinar sobre sus cenizas si es necesario.

El juego que tiene Maduro es perverso, absolutamente fuera del espíritu de nuestra Constitución Nacional y de los principios democráticos, cambiando las reglas del juego de modo que solo él pueda ganar; incluso, ha escogido a dedo a sus opositores, para dar esa ilusión de competencia y puja entre diversos candidatos que, al final, todos terminan comiendo de su mano.

Inhabilitar los partidos tradicionales y líderes políticos de la oposición, hacerse dueño del tarjetón electoral y diseñarlo a su gusto, de modo que el elector no tenga otro camino que votar por él o anular su voto, es un fraude más grande que el Parque Central de Caracas.

Bajo esas condiciones, no es posible elegir a un candidato para la presidencia de la República, Maduro se aprovecha de nuestra cultura legalista y democrática, sabe que los venezolanos en la gran mayoría somos respetuosos de las leyes y las formas cívicas, y nos obliga a entrar por ese embudo para conseguir un “triunfo electoral” diseñado a su medida.

Lo que pretende hacer Maduro con su CNE puede que revista la ilusión de que se trata de un acto administrativo, pero no es legal, es puro fascismo, hacer del estado y de los que dicen ser sus dueños, dioses más allá del bien y del mal.

Puede que la normativa que dicta estos cambios del CNE tenga forma y se exprese de manera formal en términos jurídicos, pero su contenido es injusto y discriminatorio; puede que los funcionarios que la emitan pretendan actuar en un ámbito de soberanía, pero no cuentan con la participación ni la voluntad general, todas estas normas electorales están constituidas fuera de nuestra Carta Magna y por lo tanto no son válidas; puede que estén respaldadas por las armas que fueron de nuestra República, que persigan con su aparato represivo a los opositores como enemigos del estado, pero esas normas bajo las que actúan, esas decisiones electorales que bloquean a unos y permiten a otros registrar sus candidaturas, siguen siendo absolutamente írritas.

Con estos actos, el gobierno de Maduro se ha puesto al margen de la ley, muy a pesar de la puesta en escena de “Yo soy el estado” propia de los gobiernos absolutistas, de las aplanadoras que tiene en todas las instituciones gubernamentales y sólo obedecen a su voluntad, son el resultado de un gobierno antidemocrático y se ha hecho ilegítimo; los venezolanos no podemos ni debemos acompañarlo en ese camino, so pena de estar colaborando en sus crímenes de lesa majestad.

Quienes hoy lo apoyan: militares, políticos, diplomáticos, comunicadores sociales, iglesias, farándula, intelectuales, deportistas, tragan grueso por el asunto de la mancha horrible que les mencioné, asociarse de manera abierta y contumaz a un tirano es un asunto delicado, pues significa hacerse cómplices de unas violaciones que ya están en el expediente, y de los crímenes que están por ocurrir, porque ahora lo que viene es más terror.

El gobierno de Maduro dejó de ser el de un país llamado Venezuela, no hay absolutamente nada que sostenga su institucionalidad, al despreciar la voluntad de la mayoría de los venezolanos dejó de representarnos, carece de soberanía, pues en este estado de excepción en que vivimos él no manda ni la controla, sus alianzas regionales se debilitan, ya que ha pasado la raya roja debido a sus abusos de poder;  a partir de ahora, sus negociados se harán en términos de una pandilla y no de un estado nacional.

Mi recordado amigo y experto en Derecho Público, el Dr. Henrique Iribarren Monteverde, en su trabajo de incorporación a la Academia de Ciencias Políticas y Sociales (2013) nos recordaba que el Estado de Derecho es: “Un estado donde el Poder Público está sometido al derecho y del cual todas sus manifestaciones están legitimadas y limitadas por el derecho” y nos refiere a la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, en su artículo 16, aprobada en Francia el 1789 y que decía: “Toda sociedad en la cual no esté asegurada la garantía de los derechos, ni determinada la separación de poderes, no tiene Constitución”.

El chavismo ya tenía tiempo desconociendo los acuerdos a los que llegaba bajo observación internacional, cambiando los términos de sus propias negociaciones, lo que demuestra que no tiene palabra y que su intención expresa es engañar, incluso a sus propios aliados, lo cual lo confirma como un tramposo, un maula y un operador poco confiable.

 Ya no puede retratarse como demócrata, aunque arregle el escenario para verse como alguien que ha cumplido con los extremos legales, que ha jugado limpiamente, y esto lo hace por una necesidad perentoria de legitimar su corrupto gobierno.

 Pero, vistas las condiciones en que se celebrarán las elecciones, el enorme retardo para poner al día el registro electoral, las misérrimas condiciones que ofrecen para la observación internacional, sumando todos los obstáculos operacionales el día antes y después de la votación, incluyendo el uso de unas máquinas para el voto automatizado en las que nadie confía, más el infame Plan República en manos de las FFAA, cuyo aparente propósito es borrar las evidencias de las trampas del gobierno, nos encontramos que ese fraude es lo único que podemos esperar en este acto comicial, a menos que el país todo, en una arrolladora mayoría, se pronunciara en las urnas en torno a una unidad y de un candidato.

La gran ventaja para la oposición es que todo esto se ha venido realizando frente a la comunidad internacional, con el desparpajo de quien no tiene vergüenza en enseñar sus partes pudendas al público, prácticamente regodeándose, publicitando sus ilícitos electorales a los cuatro vientos, declarando que todo es legal porque está comprendido en la normativa, repetimos, una normativa hecha a la medida de grupos criminales y viciada de toda equidad, que viola las garantías fundamentales de los ciudadanos, que atenta contra sus derechos humanos y a espaldas de la Constitución Nacional.

No son pocos los países e instituciones multilaterales, ONG´s y organizaciones vigilantes de los procesos electorales, que han advertido sobre las irregularidades cometidas por el gobierno de Maduro, sobre los incumplimientos a los acuerdos internacionales que ha firmado con la oposición democrática, en especial el acuerdo de Barbados, sobre la serie de injustas detenciones de políticos y colaboradores de la Sra. Machado, sobre las amenazas a periodistas y desapariciones de personas que han criticado al régimen para crear un clima de terror, sobre las actuaciones de la Fiscalía y tribunales contra ciudadanos, acusándolos de crímenes de odio y conspiraciones de las que no tienen ninguna prueba.

Lo que nos queda a la oposición venezolana es salir del esquema que nos plantean los chavistas revolucionarios, y denunciar las elecciones del próximo Julio ante la comunidad internacional como lo que son: una trampa. Maduro está a milímetros de dar un golpe de estado

Y esto es importante, debe existir la denuncia, sin perder más tiempo; los partidos políticos, las ONG´s, las instituciones afectadas por este juego macabro, los candidatos inhabilitados, las comunidades, los ciudadanos deberíamos estar escribiendo y consignando nuestra protesta y denuncia ante este estrafalario fraude electoral, ante todas las organizaciones multilaterales del mundo, ante todas las cancillerías; los venezolanos en el extranjero deberían estar alzando su voz para desenmascarar este terrible golpe contra la democracia.

El gobierno de Maduro, en este acto desesperado de miedo y traición, se está quebrando él solito. Maduro optó por el camino equivocado, el picar siempre hacia adelante y el tratar de mantener el protagonismo, sin importar las consecuencias, lo están llevando a su propia destrucción. No permitamos que unos oportunistas, con su lógica de “realismo histórico”, con su pretensión de hombres y mujeres prácticos (astutos), nos engatusen para acompañarlos en su comparsa.

La ruta electoral aún no termina, no tenemos candidato, pues han sido inhabilitados de facto, pero del lado chavista hay una lista de personas jugando un juego de imposturas y engaños, el pueblo los llama “alacranes”, muchos de ellos con grandes ambiciones de poder y fortuna, candidatos con un precio, que podrían, si les llegamos a ese precio, garantizándoles su seguridad y relevancia en un futuro gobierno, traicionar a los revolucionarios y pasar a nuestro lado.

En la teoría de las conspiraciones todo es posible, por más vigilados y seguidos que estén estos candidatos pre a porter, sería cuestión de entrar en negociaciones secretas con ellos, Maduro y los cubanos perdieron el impulso que traían, el juego está totalmente al descubierto, lo cual los ha debilitado, y la oposición democrática tiene influyentes aliados que podrían ofrecer no solo dinero, seguridad, sino hasta un exilio dorado, si fuere necesario.

Cualquier oferta que les haya hecho Maduro podría ser fácilmente superada por la unidad democrática, ¿Qué podrían ofrecerle los cubanos castristas, arruinados y roñosos a estos candidatos? ¿Cuál sería la oferta de Maduro, que todos ellos saben jamás cumplirá, para que brindaran sus nombres para semejante acto? ¿Acaso hay alguno de ellos que le importe su prestigio personal y su papel en la historia?

Aunque tengo la impresión que damas como María Corina Machado o la profesora Corina Yoris, mujeres sobrias y muy rectas, serían incapaces de avanzar en estos terrenos de espionaje, dobles agentes y sobornos para conseguir nuestro “Candidato de Manchuria”, reconozco que, dentro de los partidos que nos acompañan en la unidad, hay no solo gente cualificada para hacerlo, sino negociadores de un fino instinto que lleven a buen término esta propuesta indecente.

Maduro nos tiró al ruedo a esos alacranes para que bailáramos pegados con ellos, sería cuestión de escoger cual es el alacrán que tiene la ponzoña con menos veneno, aproximarnos a él y hacerle esa oferta irresistible; estoy seguro de que tendríamos candidato.

sábado, 9 de marzo de 2024

Una cuestión de soberanía.

 



El título de este artículo trata de diferenciar el concepto de soberanía según el chavismo, que como ya veremos no solo es impropio y falso, sino que en términos funcionales, solo sirve para asustar a los ignorantes y tratar de darle brillo y legitimidad al poder de mafia y pandilla que tanto Maduro como sus cómplices Diosdado Cabello y Jorge Rodríguez tienen como fin del estado.

El término de soberanía experimentó un rápido cambio al final de la Primera Guerra Mundial como resultado de una reestructuración del Orden Mundial, nacido del tratado de Westphalia, el concepto de soberanía le daba cuerpo y funciones al estado moderno; en la ficción jurídica resultante, cada estado-nación consistía en una voluntad independiente y absoluta de poder, que en manos de una persona o distribuidas en instituciones y rangos, representaba a sus ciudadanos en todas las decisiones, tanto internas como de política internacional frente a los demás estados, y su concurrencia en los foros internacionales lo hacía en términos de igualdad, sin importar el tamaño o el poder de los participantes a estos foros.

A lo interno la soberanía encarnaba el poder absoluto del estado frente a sus súbditos, lo legitimaba al punto de imponer a la fuerza sus designios y de convertirse en el único árbitro en los asuntos internos de su nación, esto era una herencia del estado absolutista de las monarquías europeas que creían que el poder derivaba directamente de Dios a sus testas coronadas.

Para algunos estudiosos, este concepto primario expresado en términos absolutamente Hobbesianos, escondía entre sus pliegos, al oscuro germen del autoritarismo más descarnado, pero al finalizar la llamada Guerra Fría, y con el triunfo del realismo en la política internacional, la soberanía se vio seriamente cuestionada, al punto que, pensadores de la talla de un Jacques Maritain, pidió su abolición en los años de la entre guerra.

En el nuevo escenario de la globalización, era cada vez más difícil sostener la monolítica idea de la soberanía que nos venía de los primeros estudios de Bodin en el siglo XVI y luego de Hobbes en el XVII, entre otras cosas debido a la intensa y rápida fluctuación de las alianzas, pactos y conflictos que surgían en el tablero mundial, y de la expansión de problemas que ignoraban las fronteras, como los desastres climáticos, las epidemias, las guerras, el crimen organizado...

Pero además, propiciados por los intereses políticos, comerciales, militares y culturales que estaban en permanente movimiento, las inversiones, el entretenimiento y los mercados en crecimiento no podían esperar a los procedimientos burocráticos de una soberanía retardataria, que lo que busca es poner en primer plano los intereses egoístas de las naciones estados.

A lo interno, tampoco parecía posible preservar la concentración del poder, los estados se veían obligados a compartirlo con diferentes oficiales encargados del territorio como gobernadores y alcaldes, luego con grupos de interés, algunos de carácter étnico, otros que aglutinaban gremios de trabajadores, profesiones, poder financiero y con el fortalecimiento de la ideología liberal y la promoción de la democracia, con el sistema de partidos políticos, ONG´s y grupos de opinión, ese poder absoluto se fragmentó y se tuvo que recurrir a las negociaciones, y a una verdadera apertura de la participación, tal como lo expresó Rousseau cuando hablaba de la voluntad colectiva como la base real de la soberanía.

Chávez, cuando fue presidente de Venezuela, propugnaba por una multipolaridad en el mundo, lo que lo convertía en un globalista, solo que en su caso privó lo ideológico y su posición antiimperialista lo llevó a romper vínculos con nuestros socios tradicionales en Europa y Norteamérica, pero lo hizo de una manera poco amigable y amenazante, ganándose enemigos poderosos y poniendo al país todo en un peligroso curso de retaliaciones, de nada sirvieron las advertencias y voces de alarma, a lo interno de Venezuela el chavismo se impuso bajo el modelo fascista militar, y de hecho estableció una hegemonía política que anulaba toda oposición.

Pero fue una hegemonía muy sui generis ya que permitía que extensos territorios del país fueran controlados por fuerzas subversivas extranjeras como grupos guerrilleros, colonias de mineros ilegales, avanzadas de emigrantes árabes y fundamentalistas musulmanes, y no contento con eso permitió de manera abierta y pública, la intromisión de oficiales cubanos en el seno de nuestras fuerzas armadas, y entregó los registros públicos y notarías a empresas extranjeras en detrimento de la confidencialidad de la información de los ciudadanos sobre sus relaciones y propiedades.

El globalismo chavista se caracterizaba por hacerse miembro de los países no alineados, de los clubes de las excolonias como CARICOM, creo asociaciones como el ALBA o Mercosur, que agrupaba a gobiernos socialistas, coqueteó con los BRICS, como alternativa de bloques económicos, se anotaba con todos los conflictos Norte-Sur en favor de la izquierda internacional, afianzó su amistad con los países radicales musulmanes y con todo grupo revolucionario y fundamentalista, esta pretensión marcadamente anticapitalista, específicamente como enemigo de Estados Unidos de Norteamérica fue seguida como política exterior por Maduro, contrario a lo que pensaba y sentía la mayoría del país, y por seguir esta senda violenta y con conexiones en el submundo del crimen, Venezuela fue objeto de sanciones internacionales que afectaron nuestro desarrollo, todo por una comezón de orden ideológico y su filiación a los países dependientes del castro comunismo, dirigidos desde La Habana (y finalmente desde Rusia y China).

Pero, y este pero es importante, ya que imbricado en el concepto de soberanía, viene la posibilidad de hacer política, de que las sociedades a lo interno, puedan discutir y darse el mejor sistema posible de gobierno para alcanzar sus fines como nación. El politólogo James Tully nos advierte: “La soberanía en su sentido no-absoluto significa la autoridad que tiene la gente en una cultura diversa de asociarse y gobernarse ellos, por sus propias leyes y libres de cualquier subordinación externa.” Pero además, tenemos la advertencia del estudioso R.G. Collingwood: “… y aquellos quienes descartan la soberanía como una ficción degastada, en realidad tratan de desconocer la problemática integral de la política.”

Pero por la naturaleza radical y corrosiva del chavismo hace imposible una utilización racional de la terminología, y la soberanía es utilizada de manera pragmática, por lo que el concepto se hace ambivalente, relativo y sujeto a los intereses del poder de turno.

Cuando uno escucha a los funcionarios chavistas hablar de soberanía, sobre todo en el ámbito judicial, podemos notar las contradicciones y el utilitarismo con que es usado, los delitos de traición a la patria, de conspirar en contra de la seguridad del estado, que tienen su sustento en el concepto de soberanía, se desmorona cuando somos conscientes de que es el mismo gobierno chavista los que utilizan la soberanía para destruir el país en su base ecológica e integridad ambiental por medio de una minería salvaje, desarrollos turísticos en áreas protegidas, del comercio de especies en extinción, de la proliferación de derrames petroleros incontrolados, que son delitos que hacen un daño mayor a la integridad territorial y la calidad de vida de los venezolano.

No hay que ser un genio para darse cuenta que la soberanía es usada a discreción por un gobierno corrupto, cerrando medios de comunicación que se atreven a denunciar los crímenes del estado, persiguiendo a las ONG´s que los ponen en evidencia en sus oscuros manejos y modificando a discreción acuerdos políticos, simplemente interpretando las leyes a la conveniencia de sus intereses, la impresión que da el gobierno chavista es que se trata de un intermediario de la soberanía nacional, la cual está a la venta para aquellos que puedan pagar el precio que ellos exigen.

En términos de hacer cumplir el mandato soberano a lo interno, el chavismo está sumamente limitado, cuenta con las armas de la República, con sus Fuerzas Armadas y el aparato represivo que maneja como si los ciudadanos fueran el enemigo, permite el concurso de órganos foráneos de inteligencia y control social, siempre pendientes de la ratio Violencia/Reacción Social no los desborde pues son minoría, y la fuerza pública, inconstante en sus lealtades. Pero es haciendo valer la soberanía del país en el escenario internacional, donde se le ven las costuras al concepto que maneja el chavismo, a lo externo la soberanía se respalda con poder, con maquinarias militares capaces de movilizarse globalmente de manera efectiva, con inteligencia que pueda entender y anticipar situaciones complejas de peligro e inestabilidad, con el dinero suficiente para soportar conflictos de baja y alta intensidad en el tiempo, con bloques de países aliados que respalden las medidas.

El gobierno de Maduro no pudo imponerse en su pretensión a un simple avión que reclamaba como suyo y que fue incautado y destruido por otro país, no pudo hacerle frente a un cúmulo de sanciones económicas y penales en contra de su gobierno, no ha podido hacerle frente a una emergencia humanitaria que sufre la población a pesar del respaldo internacional para solucionarlo, ha sido incapaz de levantar su muy disminuida industria petrolera que ellos mismos se encargaron de desmantelar, no han podido frenar procesos penales en contra del mismo Maduro por violaciones de derechos humanos, los reclamos territoriales que tiene el país en organismos internacionales no se encuentran bien aspectados, precisamente por su debilidad en el manejo de la soberanía… en fin, la soberanía absoluta con que se llenan la boca se encuentra muy golpeada fuera de nuestras fronteras.

Hace falta una reingeniería de la soberanía en Venezuela, no podemos continuar manejando terminología e ideas que están fuera de la realidad actual, pero para ello hace falta un nuevo gobierno con una concepción diferente del estado, necesitamos administradores sensatos y con conocimiento del mundo actual, de las instituciones paraestatales y globalizadas que están manejando parte importante de la comunidad de naciones civilizadas, la globalización no es una moda ni una tendencia, es un estadio evolutivo necesario en la consecución de un nuevo Orden Mundial para un planeta en problemas, donde ya las crisis nos afectan a todos.

Pero en Venezuela todavía encontramos a unos revolucionarios del jurásico que expulsan del país a observadores internacionales, que no paga su cuota respectiva en los organismos multilaterales, que pretenden hacer trampas electorales para legitimar su desastroso gobierno, frente a un mundo que observa asqueado y asombrado los malabarismos de Maduro, bajo la excusa de que somos soberanos y hacemos lo que nos da la gana.



jueves, 29 de febrero de 2024

El juego del gato y el ratón.

 




“Las elecciones son sólo una forma—si bien muy importante— de hacer eficaces las discusiones públicas, especialmente cuando la posibilidad de votar se combina con la oportunidad de hablar y escuchar sin miedo a la represión. La fuerza y el alcance de las elecciones dependen crucialmente de la existencia de un debate público y abierto. Reducir la democracia a sólo votar resulta lamentablemente inadecuado, como queda ampliamente ilustrado con las asombrosas victorias electorales de las tiranías gobernantes en regímenes autoritarios; desde Stalin en la Unión Soviética, hasta Sadam Hussein en Iraq. El problema en estos casos reside no sólo en la presión a la que se somete a los votantes durante las elecciones, sino a la forma en que la discusión pública se ve frustrada, transgredida y alterada a consecuencia de la censura, la supresión de la oposición política y la violación de los derechos civiles y de las libertades políticas fundamentales”.

Amartya Sen, El valor de la democracia

 

Para mí entender, Maduro y el Chavismo están jugando a otra cosa que no es política, tal y como la entendemos quienes hemos estudiado la teoría política y nos hemos paseado por la historia, menos todavía, se trata del juego democrático en el que pretenden participar como árbitros y jueces en el proceso electoral, que por mandato constitucional debe producirse en este año, si bien es cierto que “ellos”, los chavistas, creen que moviendo candidatos en el tablero, promoviendo a los suyos e inhabilitando a los que no son de su gusto, ocultando información a los electores, desinformando, rompiendo acuerdos e incumpliendo tareas, se van a salir con las suyas.

Hay analistas políticos que opinan lo contrario, que “todo” lo concerniente a las relaciones entre las instituciones, los ciudadanos, las instancias de poder, no importa si la obligación y los deberes resultan del cañón de una pistola apuntada a nuestras cabezas, es política, por lo tanto, todo lo que hace el chavismo de manera abusiva y contraria a la norma, “es política”, y se debe tratar y conjugar como si fuera algo racional, de acuerdo a unas normas y como parte de un continuo histórico.

Este tipo de actitud conduce no solo a terribles errores, análisis equivocados y “memes” y consignas que lo que hacen es confundir, como por ejemplo “el único instrumento de cambio de un demócrata es el voto”, los que saben de política reconocen que hay múltiples maneras de cambiar una realidad social, aún en las situaciones más oscuras y enredadas, pero como bien dice Amartya Sen cuando habla de los regímenes autoritarios. Las elecciones que eligen a quienes detentan el poder por la fuerza, tal y como las entiende el gobierno de Maduro, solo se ganan con la trampa y el abuso.

La Sra. María Corina Machada, la candidata demócrata de la mayoría real de los venezolanos, nos ha dado una extraordinaria lección de cómo se ganan elecciones, su valentía y pundonor ha conquistado y sigue sumando la voluntad de los electores, del pueblo de Venezuela, en un trabajo de hormiguita en donde no solo ha arriesgado su tranquilidad, sino su propia vida, y lo sigue haciendo. Para quienes no se han dado cuenta, los partidos políticos de la oposición democrática montaron unas elecciones primarias nacionales contra de viento y marea, sin el concurso del estado chavista, hostigados por la barbarie, pero donde participaron todos los candidatos postulados por sus plataformas políticas, María Corina Macado y su partido Vente Venezuela, logró ganarlas con una clara mayoría, sin CNE, sin máquinas automatizadas, sin Plan República, sin financiamiento del estado.

Le duela a quien le duela fue una elección popular, soberana, en el marco de las leyes del país, donde los que participamos como votantes no escatimamos esfuerzos por expresar nuestra opinión, en un clima comunicacional enrarecido, cargado de censura, bajo la vigilante amenaza de los órganos reguladores del estado. Ese caudal de dos millones y dele de votos que le dieron el triunfo a la candidata, se convirtieron en un patrimonio político de María Corina, fue ella quien los trabajó, quien recorrió el país hablando con la gente y poniendo la cara, fue ella la que se multiplicaba por toda la geografía nacional y que a pesar de las alcabalas, los acosos, los ataques del chavismo resentido, se atrevió a no jugar el juego bajo las reglas de los “revolucionarios” y despegarse de la manada dócil y obediente a los designios del tirano.

Ese patrimonio electoral hoy está multiplicado por cuatro, y sigue creciendo, a medida que el descontento social se acelera y la ineficiencia gubernamental se incrementa, las bases mismas del chavismo claman por un cambio y la única que les está dando esperanzas y su visión de una Venezuela distinta, es ella. Maduro y su plana mayor de funcionarios gubernamentales, presas de pánico por los resultados decidieron inhabilitar a la candidata, por medio de un subterfugio legal que no tiene ningún sentido jurídico, y violándole sus derechos ciudadanos, tratan de imponerse desde el poder.

Ahora, escucho con sorpresa y leo con desagrado las opiniones de quienes piensan desde la oposición, que estamos compitiendo en contra de unos demócratas, que el chavismo debe ser considerado una organización política, que a pesar de sus desplantes, es y continúa siendo un movimiento político contra el cual es posible competir en términos de justicia y equidad, que se lanzará a una consulta electoral sin trampas, cuando ya sabemos de lo que es capaz de hacer, cuando su palabra no vale un céntimo, cuando temen verse desplazados del gobierno los hace cometer torpezas como inhabilitar a la candidata de la manera más absurda y vil posible, violando la ley y exponiéndose al desnudo ante la comunidad internacional, la detención de integrantes del partido de la candidata bajo cargos de conspiración son apenas un preámbulo de lo que viene.

Se me revuelve el estómago cuando veo a políticos y analistas pidiéndole a María Corina que nombre un sucesor para estas elecciones presidenciales, que haga otro “sacrificio” por el país, que se desprenda de ese patrimonio electoral y se los de a ellos, para competir en unas elecciones que sabemos serán “inadecuadas”, al decir de Amartya Sen, al mejor estilo estalinista o siendo más contemporáneo, al estilo Putin o al del castrocomunismo nicaragüense o cubano.

La ruta de las elecciones en Venezuela no es una línea recta, es una forma fractal que debe tomar diversas configuraciones sin perder su esencia, conservando siempre la posibilidad de reproducir su complejidad desde su mínima expresión, María Corina nos está enseñando una lección de sobrevivencia política, inteligente, acumulativa y novedosa. Quienes claman porque entregue su liderazgo no entienden que así como muchos de nosotros somos parte de su patrimonio político, ella nos pertenece a cada uno, no es un cambio de nombre ni de cara.

A medida que el tiempo pasa y el chavismo esté ocupado en designar su candidato entre la enorme parrilla de opciones que se ha comprado como contendor, o si al final, es el mismo Maduro quien repitiese para la reelección, el gobierno se sigue desplomando él solito, ya no hay fe en la revolución, los errores, traiciones y olvidos han sido demasiado duros incluso para los más ignorantes y pérfidos de las comunidades e instituciones que conforman el gobierno, el pueblo ya sabe que el futuro no es por allí.

Quiero que piensen en algo importante, si Maduro y el chavismo ya tiene el poder ¿Qué más necesitan que los obliga a ir a unas elecciones mañosas?

La respuesta es, necesitan legitimarse, lavarse la cara ante la comunidad internacional, hacerse pasar como gobierno serio e institucional ante el mundo, incluso antes sus propios aliados, porque no basta tener al país agarrado por las bolas y hacer lo que les dé la gana con él, necesitan validar una razón de ser, deben contar con un discurso político que se traduzca en una continuidad histórica, en una identidad propia, en un sistema de principios y creencias que tomen en cuenta al pueblo que dicen gobernar… y no lo tienen, y sin ello, será difícil que vengan las inversiones necesarias, nadie volverá a hacer negocios con ellos o siquiera pisar el país, ya que puede pasar cualquier cosa y lo más seguro es que sea algo muy desagradable, como ya ha sucedido con sus propios socios, y así no pueden existir.

Y esto lo digo, no porque los chavistas sean unos “aviones” en eso de hacer negocios, sino que han permitido que vengan otros gobernantes simplemente a aprovecharse de nuestra indefensión y a llevarse nuestras riquezas, sucede a cada momento con el gobierno de La Habana, con Bielorrusia, con el primer gobierno de Lula en Brasil, con los países del Caribe, han permitido que se perdieran nuestros mercados petroleros… son historias que dan pena ajena.

Un país no se legitima ante una comunidad de naciones con base a torturadores, a presos políticos, a expoliadores de recursos naturales haciéndose pasar como ecologistas, maltratando mujeres, descuidando la atención a la salud de infantes y personas mayores, permitiendo el resurgimiento de enfermedades contagiosas endógenas que teníamos controladas, arreglando las elecciones para que ganen sus candidatos, diciendo mentiras, no honrando sus obligaciones con los deudores.

Por pura inercia se habían ganado la buena voluntad de algunos países (en realidad es porque se puede hacer dinero tratando con los revolucionarios como ya lo explicamos, el caso de la Turquía de Erdogán, o de nuestro oro en Catar son claros ejemplos de cómo se ganan “amigos”), pero ya el chavismo está tan desprestigiado en el mundo, su comportamiento ha sido tan perverso, que poco a poco se le están cerrando las únicas puertas que permanecen abiertas, arruinaron al país, lo desmembraron, huyeron sus habitantes, los que quedan no se dejan manipular, ni aún presos y bajo tortura, mientras que la candidata María Corina Machado por su lado, está aglutinando a los venezolanos en el mundo, a los venezolanos en cada uno de los estados y municipios del país, el chavismo se desinfla, María Corina crece, y esto es así porque ella, de todos los demás candidatos, representa ese cambio necesario que Venezuela tanto anhela y necesita.

Maduro se ha convertido en el más impopular de los presidente en nuestra historia, y eso que los hemos tenido muy malos e ineptos, pero lo que se exhibe hoy es impresentable, indigno, la tarjeta de presentación de un funcionario chavista pareciera decir “Violador de Derechos Humanos” que es como son reconocidos en el mundo… si los chavistas fueran inteligentes (es un oxímoron) aceptarían de buen grado perder las elecciones, o simplemente no concurrir á ellas, irse a las duchas y refrescarse para continuar en la política (la verdadera), eso no es malo, todo lo contrario, podrían renovarse, hacer inventario, reorganizarse, pagar indulgencias.

Una última apreciación, tal y como van las cosas, burlarse del país con unas nuevas elecciones que no eligen, continuar con este pobrísimo show dañará irremediablemente al chavismo y perderán la oportunidad de hacer política de verdad, no tienen escapatoria, están desapareciendo solitos… pero el país no puede esperar, si les importara Venezuela se sentarían a negociar con María Corina Machado y permitirían el cambio, quiéranlo o no, es inevitable.

Si vamos a la historia, cada uno de esos gobiernos totalitarios que han existido y probablemente, existirán, por ser la negación de la política, por ser antidemocráticos, no han salido con votos, o han sido removidos a la fuerza, o se han extinguido ellos mismos dejando al país exhausto…

Esa bandera que ahora ondean Maduro y el chavismo de unas elecciones que nadie sabe cuándo serán, quienes participarán y como se realizarán, con un CNE que es una lamentable marioneta del régimen, es un indicativo de que el final está cerca, no perdamos la calma ni la cordura, estas elecciones tal y como están planteadas son un caramelo envenenado, y quienes piden que María Corina renuncie a su tarea de convocar a los venezolanos a la unidad, que entregue su patrimonio electoral, simplemente están jugando para el otro bando, aprovechando el desespero como el gato juega con el ratón cuando lo tiene atrapado.

 

 

lunes, 12 de febrero de 2024

La Ciencia Ficción en Latinoamérica y, particularmente, en Venezuela.

 




El siguiente artículo está dedicado a la valiente activista de derechos humanos, Rocío San Miguel quien fue secuestrada y desaparecida por el régimen de terror que impera en Venezuela, y que tiene bajo amenaza continua  los derechos fundamentales de todos los venezolanos. En honor a la mujer venezolana.

 

 La Ciencia Ficción en Latinoamérica y, particularmente, en Venezuela.

 

Tengo103 años, firmes como erecciones/ Recuerdo el día en que fui injertado de la glándula taumaturga/ El cirujano sembró en mí  la astilla de eternidad/ Para injertarme/ trajeron un gorila de timidez resuelta/ como la que da el ojo de un inmigrante joven/ Era un hermoso cuadrohumano/ un segundón de selva/ el hermano de leche de mi resurrección/ Al concluir el injerto/ quedé dormido/  Pero aquella misma noche/ empecé a sentir a mi huésped moverse/ Se aclimataba a mis vías urbanas/ con torpeza de criado pueblero/ Lo sentía saltar de rama en rama/ hasta la copa de mi árbol circulatorio/ Lo sentía colgado por el rabo en mis nervios/ y al fin se fue asomando al sabor de mi boca/ cuando la carne del balneario se desgajó sobre la arena/ Tengo 103 años/ firmes como erecciones/ y digo que la vida es buena de beberla/ Tengo cien hijos míos/ y en mi próximo plano/ seré el mejor logrado de mis nietos/Tengo cien hijos míos/ y uno que tuve en nombre de mi hermano el gorila/ porque puse en tenerlo mi pedazo de él…

 

Extracto del poema Autorretrato de Andrés Eloy Blanco (1929), de su obra Baedecker 2000, escrito en las bóvedas del Presidio de Puerto Cabello mientras cumplía la pena de trabajos forzados.

 

La Ciencia Ficción es un lugar en el universo donde todo es posible, aún lo imposible; creo que en sus espacios ocurren situaciones límites para el ser humano y tantas otras especies que comparten la vida, en todas sus manifestaciones y dimensiones, con nosotros. Es, ultimadamente, el gran telón de fondo donde se pueden desarrollar los grandes conflictos y esas pequeñas vanidades que nos dominan y nos convierten en monstruos, yo creo, sin que me quede nada por dentro al decirlo, que se trata del verdadero futuro de la literatura.

Es prácticamente imposible imaginar al hombre despojado de sus relaciones con las cosas y el paisaje que le rodean, de esa “razón instrumental” de la que hablan los filósofos y que relacionan al hombre con la tecnología que encuentra o crea, que inventa en los laboratorios y talleres o trata de entender, por medio de la ingeniería en reverso, desde la cura para enfermedades mortales y contagiosas,  medios de transporte que permiten trasladarnos a enormes distancias, hasta armas de destrucción masiva.

Ese “viaje hacia lo maravilloso” no está exento de sus riesgos y peligros, y porque somos humanos estamos siempre en manos del azaroso destino, de incontables prejuicios, ideas equivocadas, creencias infundadas y siguiendo a “mesías” que terminan siendo nuestra perdición… pero, aun así, el viaje vale la pena, la aventura no se detiene sino al final del partido - parafraseando a un filósofo del beisbol - y nos encontramos con ganadores y perdedores.

Por eso, cuando miro hacia ese rico entramado que es la literatura fantástica y de ciencia ficción en nuestro continente americano, no me queda la menor duda de que estamos enfrente de un continente ignoto y misterioso, casi inexplorado, que bien merece la pena de abrirnos paso en su espesura que algunos expertos han situado en el siglo XVIII, y los más alucinados aún antes.

Los tres motores fundamentales de la Ciencia Ficción en Latinoamérica se encuentran en Argentina, Brasil y México, todos ellos marcados por la ideología, por una particular manera de ver al mundo, no sólo por su alta producción sino por la tradición que se han labrado en el tiempo; toda una constelación de autores y obras pueblan el universo de la fantasía, el horror y la ciencia ficción en nuestro continente; esto no quiere decir que no haya producción, y de la buena, en los otros países, Centro América y el Caribe están viviendo uno de sus mejores momentos con audaces propuestas. Cuba es un caso admirable pero mediatizado por una ideología totalitaria que se hace demasiado obvia, Chile nunca ha cejado en su esfuerzo de estar a la cabeza con sus grandes estilistas, Colombia y Venezuela no se quedan atrás. Perú es una mina de ricas vetas, Paraguay, Uruguay, Bolivia… no quiero que se me quede alguno afuera en este conteo, trato de estar al día en mis lecturas, pero simplemente es imposible, siempre salta un autor o una pieza que son verdaderas joyas de la imaginación y son grandes desconocidos.

Es de destacar el papel que han jugado nuestras mujeres en la construcción de nuestro templo a la imaginación, nombres como Elena Aldunate Bezanilla, Angélica Gorodischer, Marcela del Río, entre otras muchas, dejando nuestro poder creativo muy en alto, a la par de las mejores autoras del mundo.

Internacionalmente, hay un interés creciente en los círculos académicos y el mundo del entretenimiento en explorar el rico bagaje de nuestra literatura fantástica y de ciencia ficción, no pasan los meses sin que nuevos estudios y colecciones de obras salgan a la luz, o nuevas historias en películas o series que son consumidas con voracidad.

Uno de los problemas que surgen, al precisar las formas que adquiere la CF en nuestro continente, es el enorme peso que ejerce la literatura fantástica en la moldura de este importante género para nuestra región. Para quienes creen que la CF es parte de la literatura fantástica, su más reciente vástago, junto a la literatura sobre mitos, la folclórica, los cuentos de hadas, las narraciones sobre viajes, los escritos utópicos, se  trata de una especialidad que está lejana a la llamada literatura “realista” o naturalista, que como bien apunta  el especialista Darko Suvin en su obra Metamorfosis de la Ciencia Ficción (1979):

 

Si se logra… reproducir fielmente las texturas y las superficies empíricas apoyadas en los sentidos y en el sentido común del ser humano, llamaré al resultado narrativa naturalista. Si, por el contrario, se preocupa eliminar esas relaciones creando un marco de referencia formal radical o significativamente distinto-una ubicación espacio-temporal o unas figuras centrales diferentes, no verificables mediante el sentido común- llamaré al resultado narrativa de extrañamiento.

 

Y si vamos a una conceptualización mucho más práctica y menos académica, me gusta la aproximación que tiene el reconocido escritor de CF,  Orson Scott Card, quien en su práctico manual   , nos lleva directamente a la fuente, las librerías donde comprábamos los libros:

 

Había algunas categorías generales que eran útiles, como Ciencia Ficción, Fantasía, Históricas, Romances, Misterios y del Oeste. Cualquier cosa que no encajara en estas categorías las apilaba bajo la etiqueta de Ficción. Los editores podían pegarle estas denominaciones a sus libros y ya que los dueños de librerías no podían familiarizarse con esta avalancha de publicaciones, y menos aún leer cada obra de cada autor, de esta manera sabían cómo colocarlas en la tienda para que los lectores pudieran buscarlas con facilidad.

 

Definir a la ciencia ficción es un asunto complejo, aún en la cultura anglosajona y de los países como Rusia, Japón; China, India y la Comunidad Europea, entre otros, que tienen programas de investigación y desarrollo de tecnologías avanzadas, sobre todo espaciales, de inteligencia artificial y genética, por mencionar algunos, y donde este género literario es popular; y no es fácil conceptualizar la Ciencia Ficción, entre otras cosas, por la multiplicidad de subgéneros que la conforman, tales como “hard fiction”, operas espaciales, cyberpunk, “world building”, historias de robots, distopías, ucronías, magia y espadas, viajes en el tiempo, etc… lo que hace muy difícil el deslinde entre Ciencia Ficción y Fantasía, y no es extraño que los autores migren de un subgénero a otro en el transcurso de sus carreras literarias.

Durante el siglo XIX, Latinoamérica buscaba modelos a los que imitar para embarcarse en una ruta de progreso y prosperidad, y miraron hacia el norte de Europa sobre todo a Inglaterra, Francia y Alemania, pero fue Estados Unidos el que impresionaba por haber incorporado lo mejor de estas culturas a su sistema político y social, asociado a esto, el componente literario, con un marcado acento utopista, gustaba de los llamados viajes fantásticos y de la novela científica, estas formas de arte se hicieron populares y marcaron un rumbo que empezó a ser asimilado al sur del Río Grande.

Cuando se inicia el siglo XX, la literatura Latinoamericana había transitado por una ruta donde lo fantástico era fundamental, todavía se sentía la herencia de los cronistas del descubrimiento y la conquista, que vieron monstruos, ciudades de oro, guerreras amazónicas y fuentes de la juventud en cada recodo de los grandes ríos que surcaban la selva, visiones que chocaron con la cosmología alucinada de los aborígenes, que tenían sus propias leyendas del origen del mundo, de serpientes aladas, visitantes de otros mundos y apariciones de ultratumba guiando a los vivos, conviviendo en un continente lujurioso y escarpado.

El río del cristianismo y el de las creencias de los esclavos africanos se unieron en un tormentoso afluente donde el sincretismo produjo sus propios avatares, los relatos de los mártires en un circo romano se confundían con los del chamán que exorcizaba demonios en la Nigeria profunda.

Vino la etapa colonial, luego los movimientos independentistas, conocimos a los héroes y a los mártires, vinieron los nacionalismos, el romanticismo y nuestros poetas se postraron ante los ídolos del nihilismo y el misticismo, nos arropó el modernismo y nuestros intelectuales vistieron las togas del escepticismo, mientras los más atrevidos se disfrazaban de surrealistas; con los intentos de industrialización llegaron las tormentas del marxismo y los tremores piro clásticos del capitalismo.

Vivimos durante mucho tiempo bajo el influjo de la novela realista, la consigna era retratar la realidad social imperante, pero a pesar de aquellos arrebatos, nunca olvidamos la utopía, pues es parte de nuestra naturaleza siempre esperar por un mundo mejor, somos grandes constructores de castillos en el aire, lo que de alguna manera nos daba cierta ventaja al momento de manejar escenarios sobre el futuro.

Poe, Verne, H.G. Wells, son nombres que ya son parte de nuestra cultura e influenciaron a nuestros inquietos creadores de principios del siglo XX, sobre todo a nuestros grandes estilistas que ensayaron recursos narrativos, y que si bien no eran todavía ciencia ficción, definitivamente abrieron las puertas a propuestas atrevidas, sobre todo en los cuentos. Todavía estamos esperando por las grandes novelas latinoamericanas de ciencia ficción.

 

II

Hay quienes afirman que porque en Latinoamérica, en general, no somos creadores y productores de alta tecnología, carecemos del marco cultural para realizar trabajos de buena ciencia ficción, pero somos consumidores, y eso cuenta; somos insaciables adictos del mercado globalizado de entretenimiento y espectáculos de los mass media y las redes sociales, donde la ciencia ficción ocupa un lugar privilegiado y vende millones de dólares en los servicios de videos por streaming, en publicidad, en los mercados de publicaciones (revistas, libros, comics), en la música, en los video juegos y los espectáculos asociados como clubes, grupos de opinión, en convenciones futuristas, en los circuitos de charlas; no podemos dejar de señalar que en los principales centros de producciones de material audiovisual en occidente y Asia, la ciencia ficción se ha convertido en el contenido más buscado para la realización de series y películas, prueba de ello es que hay un grupo de talentosos directores y productores de cine, que son de origen Latinoamericano y que están manejando grandes superproducciones en Hollywood y otros estudios, incluso en China.

Pero esta situación es reciente, ha sido un verdadero Boom del mercado del entretenimiento, y en la raíz de la creación de estas obras se encuentra la escritura de la literatura de ciencia ficción. Aunque todavía hay países como Venezuela, donde existe cierto desprecio – en el que se solazan intelectuales y seudointelectuales - por estas creaciones, consideradas menores en la literatura, o un arte banal, porque se trata al final del cuento de evasiones a la realidad, y eso “no es de gente seria”. Y, ¿no es la ciencia ficción una ficción pura y dura? El maltrato al género perdura en el discurso político, al asociar ciencia ficción con mentiras o delirios, o peor, cuando se trata a los escritores del género como intelectuales de tercera y cuarta categoría, y esto se refleja también en el medio académico y universitario y en el mercado de las publicaciones, la ciencia ficción sigue siendo un arte menor con un mercado escaso y poco apreciado.

Pero esto no fue siempre así, al principio del siglo XX en Latinoamérica los relatos de ciencia ficción eran consumidos casi exclusivamente por la clase pudiente e ilustrada, los intelectuales los tenían como divertimento, sobre todo en el sur, con grupos compactos como los de Borges y Bioy Casares, haciendo la observación de que, si bien Borges no escribió ciencia ficción como tal, su literatura se fue más hacia los escenarios de las paradojas lingüísticas y contradicciones metafísicas de la existencia, era un gran lector y admirador de la obra de importantes autores británicos y disfrutaba de los experimentos de su amigo Bioy.

Había pocos escritores con formación científica que pudieran elaborar sobre temas tecnológicos del futuro, pero sí había analistas políticos y observadores de la sociedad, pendientes de las tendencias y de los gustos en boga, capaces de proyectar futuros interesantes, contábamos con muchos utopistas, filósofos, sobre todo metafísicos, que podían plantear ideas abstractas y complejas situaciones psicológicas, y lo hacían con humor e ironía, con giros sorpresivos y de mucha imaginación. Arthur C. Clark acostumbraba a decir que “La ciencia ficción es algo que pudiera ocurrir- pero que usualmente no querríamos que pasara. Fantasía es algo que no puede pasar- pero a menudo desearíamos que ocurriese”.

En Venezuela nos marcó tremendamente la literatura comprometida con la denuncia social del pensamiento socialista, pero fue con el Realismo Mágico como se abordaron las primeros intentos de ciencia ficción, con escritores como Julio Garmendia, Luis Bito García, Pedro Berroeta, José Balza, que era la última generación que marcó este estilo y aproximación a la literatura.

Quienes hicieron la arqueología para establecer la prehistoria y los primeros intentos de la ciencia ficción en Venezuela se fueron por el análisis de ciertas obras de crítica social y política más que por las consecuencias de las tecnologías en el hombre, y lo cierto era que había muy pocas obras que se referenciarían en una fantasía científica. Una segunda ola de autores, entre los que se encuentran Armando José Sequera, Ednodio Quintero, José Gregorio Porras, Jiménez Ure, publican aproximaciones fantásticas sobre el tema; pero hubo de esperar hasta los años ochenta, cuando se inició en las universidades una cantidad grupos de discusión, de lectura y los primeros talleres sobre ciencia ficción; esto coincidió con algunos esfuerzos independientes por generar publicaciones, periódicos y revistas sobre el tema, pero eran esfuerzos locales, que llegaban a un público reducido.

Hubo esfuerzos como el de Ediciones Capriles, con el libro Fantasmas Computarizados (1988), en el cual escribí un par de cuentos y, junto a mis colegas Axel Capriles, María Sol Pérez Schael, Corina Esté y el filósofo Juan Nuño, se le dio una primera visita al tema de la Inteligencia Artificial.

Grupos como Ubik, editores de la revista Cygnus, el grupo Alfa, las revistas Koinos y Letraria, autores como Jorge De Abreu, Jorge Gómez Jiménez, Susana Sussmann, Ronald Delgado, que compartían su tiempo como editores y organizadores de estos grupos, llegaron a crear una red de soporte para el género, importante para la entrada del nuevo milenio.

Uno de los problemas de la ciencia ficción venezolana es que muchos de sus esfuerzos son puntuales, sin continuidad en el oficio, y la verdad es que ser autor en este género es difícil en un país que lee poca ciencia ficción, aunque en estos últimos años se ha convertido en un obsesivo consumidor de películas y series de CF, principalmente vía streaming y TV por cable.

Pasar de la narrativa fantástica a la de ciencia ficción propiamente es cuestión de acumular el momentum y los adecuados precursores para que se produzca el disparo… eso está sucediendo ahora en nuestro país.